lunes, junio 16, 2008

Humos

Mijaíl Mijáilovich Bakhtin, filósofo y semiólogo ruso, durante la invasión alemana en la Segunda Guerra Mundial se fumó la única copia de uno de sus manuscritos, un estudio sobre literatura alemana que le había llevado años escribir. Una por una, cogió las páginas del manuscrito y utilizó el papel para liar sus cigarrillos, fumándose cada día un poco más del libro hasta que no quedó nada.

10 comentarios:

MABANA dijo...

A esto se le llama, ....no tener cigarros!! o quizas nada de plata para comprarlos....

Ahora que lo pienso, ¿fumarse sus escritos?....pues vaya que fueron FUMADAS las suyas, no??

tamf

Silvia dijo...

O el manuscrito era breve o tenía mucho tabaco para líar. Claro que también lo pudo emplear para usos algo más escatológicos.
Pobre hombre, lo jodido que tiene que ser tirar el trabajo de muchos años a la basura de ese modo...
Besos

Unknown dijo...

Una cosa es segura: Mijaíl Mijáilovich Bakhtin demostró que sus escritos no eran infumables.

María dijo...

Muchísimas gracias por tu visita a mi blog y por tus palabras, ellas me trajeron aquí a tu blog, y ha sido una gran satisfacción el haber conocido tu blog.

Me parece a mí que los humos no pueden traer grandes dosis de salud, sino todo lo contrario, para lo cual, utilicemos mejor el humo invisible que no hace daño jajaja que no los que matan.

Encantada de estar en tu blog, volveré.

Saludos.

Armida Leticia dijo...

Desde mi México lindo y querido, te dejo un saludo cariñoso.

Recomenzar dijo...

bello fumarse un cigarrillo encendido por palabras de deseo!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Ignacio Bermejo dijo...

Una lástima que todas aquellas palabras se contagiaran de lo etéreo del humo.
Gracias por compartirlo.

lola dijo...

Posiblemente fue un castigo a los alemanes en general por lo acontecido al pueblo jud�o y a otros paises europeos. Es una l�stima que eso se haya perdido entre el humo y el tabaco.

Ya te extra�bamos Oshidori, un gusto volverte a leer.

Turulato dijo...

Dices que era filósofo.. ¿Hay algo mejor que quitarle a las ideas su peso?. Aligerarlas, hasta que a todos nos alcance su esencia. Que es mala cosa tener solo una, pues se agarra el individuo a ella con tal firmeza que deviene en fanático.
Quizá, reducido a la impotencia, venció a la fuerza ..
¿Cómo?. Demostrando al fumarse todos aquellos años, que no hay nada tan importante en este mundo que no pueda convertirse en humo.
¿Resultado?. Disfruta los pequeños placeres de la existencia y no te preocupes tanto..

Anónimo dijo...

Que graciosilla esta Kalía,y qué breve!
Besitos.