miércoles, noviembre 30, 2005

Leyenda del corredor

Uno no sabe muy a ciencia cierta a qué se le puede atribuir exactamente el calificativo de leyenda urbana (hay un artículo que lo explica exhaustivamente), pero voy a relatar un sucedido que -cierto o mítico- tiene gracia.
Cuando aún existían los gobiernos civiles en las capitales de provincia (parece la prehistoria, o lo es...) un gobernador civil envió a un propio a un pueblecito de la provincia para intentar atemperar los ánimos de los vecinos, que andaban un tanto soliviantados, contra una ordenanza dictada para el pueblo por dicho gobernador en un asunto de riegos. Era de imaginar la mala leche que gastaba el pueblo hacia el jerarca, razón de peso para que éste no acudiera personalmente y enviara un emisario. Pues bien, el propio llegó al pueblo, le recibieron a cantazos y se dedicaron a perseguirle hasta que pudo refugiarse en el cuartelillo de la Benemérita donde puso una denuncia contra los energúmenos en uno de cuyos párrafos decía: "A la voz de, "vamos a endiñarle", empezaron a encorrerme, cagándose además en la puta madre de su Excelencia y en la de quien ésto suscribe, que lo puede suscribir porque corrió más que ellos".

martes, noviembre 15, 2005

Bambalinas

No te relajes. Tensa tu cuerpo, tu alma y tu voz. No temas nada. Los que esperan afuera no saben ni conocen tu fuerza. Eres el creador, vas a ser dios durante un tiempo. Todos somos dios por tiempo limitado. Tu vas a serlo ahora. No hagas caso a quien diga que sin el creador tú no existirías. Tu eres el creador y él no existiría sin ti. En el cuenco de tus manos contienes un manantial de sensaciones y sentimientos que vas a derramar sobre ellos. Vas a engañarles, sí, pero ése es el juego. Tienes las palabras, el gesto, que son tuyos, solamente tuyos. Eres dios, recuerda, el único dios creador que ellos van a ver y escuchar ahora. Llega el momento. Actor, a escena.

domingo, noviembre 13, 2005

Mírame

Mírame desde esa liturgia del desorden que predicas.


Mírame con otras Palabras de Agua que nos sean a los dos desconocidas.

jueves, noviembre 10, 2005

El poema

Me pregunto si el poema no es la llama, sino la cicatriz de la quemadura alborozada de un sentimiento nuevo.