Abres un río, una palabra cuyo roce pone sentido al tiempo y al espacio anfibios de la escritura. Viene en sus aguas, como el eco esperado, el rumor de la voz que acaricia y descompone la playa y su arena estremecida.
Quiero sentir mi cuerpo habitado por la sombra de tus manos en la magia envolvente de una eterna caricia.
Quiero tocar la distancia del espacio que nos separa.
Quiero sentir mi cuerpo habitado por la sombra de tus manos en la magia envolvente de una eterna caricia.
Quiero tocar la distancia del espacio que nos separa.
6 comentarios:
ksfuhin ofom
aksdou hnvjsocniufh
ajfoufomcao
* en mi espacio sideral hay algo pa mi amigo.
pd: no me asusté, tío! joder!
ahhhh!!! ya la has tocado.
No quieras tocar la distancia, recórrela...
Que esas sombras te acaricien y te acompañen en la llegada del amanecer.
Lindas tus letras.
Besos
Yo quiero escribir como tu!
Besos, pirata!
Me ha gustado mucho tu forma poética de hablar del cuerpo del espacio, y de cómo el deseo del amante quiere fundir los cuerpos con su sombra, que no exista esa distancia que sólo separa. Bello.
Besitos
Tocar la distancia.. ¡Sí hubiese podido!
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